Lectura de 8 minutos
La noticia de Angus Cloud
El día de ayer, lunes 31 de julio, fuimos sorprendidos por la muerte de Angus Cloud, un actor joven de 25 años, muy querido, y conocido por su papel de Fezco, en la famosa serie de HBO Euphoria. Hasta el momento que me encuentro redactando este artículo, se desconoce la causa de muerte.
En el comunicado oficial emitido por la familia, se evidencia que Angus Cloud se encontraba en una situación de problemas de salud mental, y el reciente fallecimiento de su padre, hace una semana, lo habría afectado. Lo que desato una gran cantidad de comentarios en redes sociales, señalando que la causa de su muerte ha sido el suicidio.
De esta forma, navegando en redes, buscando la causa de su muerte, fue que puede ver la cantidad de comentarios desafortunados en referente al tema de la salud y muerte del actor. Por lo que me dieron ganas de escribir este artículo que, claramente, no estaba planeado.
El suicidio es un tema que hasta suena redundante
El suicidio es la tercera causa de muerte entre los jóvenes de 20 a 24 años en las Américas. Según la página oficial de la OPS (organización panamericana de la salud). Atribuibles a una variable de circunstancias personales, además de enfermedades mentales como la depresión, trastorno bipolar, esquizofrenia, alcoholismo, etc. Según esta misma organización, cada año, más de 703.000 personas se quitan la vida tras numerosos intentos de suicidio, lo que corresponde a una muerte cada 40 segundos.
El suicidio es un tema que hasta suena redundante. Durante mis tiempos de secundaria, entre los mis compañeros, hasta bromeábamos con la idea de elegir el suicidio como tema final de nuestro trabajo documental de quinto año. Pues, “Todo mundo habla del suicidio”, “Ya aburre este tema”. Y es que, es verdad. En la secundaria, elegir ese tema, junto con el VIH, eran los temas más quemados que podían existir. En cualquier biblioteca de cualquier colegio, te vas a encontrar en sus libreros un trabajo documental de ambos temas.
Sin embargo, por mucho que sea un tema muy utilizado, aburrido o quemado, para fines académicos, no pareciera que conocemos bien los trasfondos. En mi artículo anterior sobre mi experiencia con la depresión, destaque que desconocía un plan nacional sobre salud mental, y que en los informes presentados por la policía nacional y el ministerio de salud, en el 2020, las cifras de suicidio no coincidan entre ambas instituciones. En Nicaragua, ni siquiera existe una línea de emergencia en donde puedas contactar a alguien en momentos de crisis.
Los estigmas del Suicidio
El problema de no tener planes de salud mental, es que se crean muchos estigmas alrededor del tema, lo que impulsa a algunos a poner cualquier barrabasada en redes sociales. Recordemos las campañas masivas sobre el VIH, en donde lo primero que destacaban era que no se transmitía por contacto físico (Saludos de manos, abrazos, besos) y que podía estar presente en cualquier ser humano, no solo entre homosexuales, como antes se consideraba.
Por eso, es importante la creación de espacios que brinden información a la población sobre el suicidio y las enfermedades mentales, tanto en causas, como maneras de prevención. De esta forma, lograremos minimizar la ignorancia y los estigmas alrededor del tema en la sociedad, como los siguientes comentarios:
Si se mató, pues, ni modo, era un débil mentalmente
Alguien que tomo la desafortunada decisión de suicidarse es porque también creyó, que haciéndose el fuerte, saldría de su crisis. Aguanto hasta no poder más. El problema es que, desconocemos su batalla interna, desconocemos sus problemas, sus traumas, sus enfermedades, su entorno, su familia, su intimidad. Lo desconocemos todo. No fue débil, fue fuerte. Porque hasta para quitarse la vida, se necesita valor.
Anteriormente, he expresado que la forma en que nos criaron nos enseñan a “Ser fuertes y no llorar”, pues, déjenme decirles que, los hombres lloran menos, pero se suicidan más. Encontrarás esta frase en cualquier marcha sobre el suicidio, ya que, por lo general, el 79% de los casos reportados son hombres.
Solo Dios decide cuando quitarnos la vida. Él no tenía a Dios en su corazón
No quiero romantizar el suicidio, para nada es mi objetivo, pero es una acción tan disruptiva, que por eso tenemos los debates eternos sobre la eutanasia. Como seres humanos nos hemos acostumbrado a la agonía, y al sufrimiento en nuestros últimos días, que cuando alguien se cansa y decide ponerle fin a ese instinto de supervivencia, va en contra de cualquier ley humana, o divina. No entraré en el debate filosófico sobre quién tiene el poder de arrebatarnos la vida. Lo que sí se me hace importante, es que cuando estás sumido en la peor de las miserias, la soledad se apodera de uno, y no hay dios que exista en ese momento para atentar contra tu vida.
Para esto, voy a citar a uno de mis referentes, al gran Vikto E. Frankl, en su libro El principio era el sentido, menciona que, la religión tiene un efecto psicoterapéutico, pero no se plantea ningún objetivo psicoterapéutico. Y viceversa, la psicoterapia no se plantea ningún objetivo religioso. O sea, hay personas que encuentran un sentido en su vida con la religión, hay otras que no. Él nos plantea un caso en el libro sobre una monja que atendió, la cual padecía una grave depresión endógena, con peligros de suicidio – Por muy raro que parezca, era una monja. — ella logró salir de la depresión y los peligros de suicidio a través de tratamiento farmacológico. Sin embargo, sufrió mucho en el intento, ya que su confesor o sacerdote le insistía que una verdadera cristiana no podía padecer de depresión.
En otro de sus libros, El hombre en busca de sentido último, aborda de manera magistral la relación entra la religión y la psicoterapia, donde lo citaré textualmente:
“Pese a que la religión puede influir positivamente en el paciente a un nivel terapéutico, se debe decir que no cumple para nada una función psicoterapéutica. Pese a que la religión puede promover de forma secundaria cosas como la salud mental o el equilibrio interno, su objetivo no se centra en hallar soluciones psicoterapéuticas, sino más bien en hallar la salvación espiritual. La religión no es una póliza de seguros para conseguir una vida tranquila, o para vivir con el máximo de libertad, los conflictos, o cualquier otro objetivo. La religión proporciona al hombre mucho más de lo que podría ofrecer la psicoterapia, pero también exige más de él… No hay que olvidar que las intenciones de ambas disciplinas son diferentes, aunque en un momento dado ambos efectos puedan solaparse…”
Era de esperar, era un drogadicto
No solo los drogadictos se suicidan. ¿Sabían que el alto porcentaje de deudas es una de las causas más comunes de suicidio? La página de finanzas personales Plata con Platica creada por Elaine Miranda público hace algunos años un artículo sobre esto, situando el suicidio por deudas como la tercera causa principal. Actualmente, tiene un podcast llamado Endeudados Podcast, donde muy a menudo habla sobre casos similares. El creer que solo por estar en drogas o alcohol existe la posibilidad del suicidio, es un estigma.
Estos estigmas, es a través de la concientización pública, que logran derribarse. Lamentablemente, la salud mental nunca ha sido una prioridad o un tema relevante para los gobiernos.
Hagan ejercicio y se ahorran la terapia
Ya conocemos todos los beneficios de hacer ejercicio y su aporte a la salud física y mental, pero no lo es todo en casos severos de enfermedades mentales. Por experiencia propia, las veces que me han dado los peores bajones por depresión, ir al gimnasio se vuelve una tortura. Lo primero que te dicen es que obligues a tu cuerpo, aunque no quiera, que hay que levantarse de la cama. Es difícil lograrlo, pero no imposible. En momentos donde existen pensamientos de suicidio, ir al gym no es la única solución. Esto tiene que ir de la mano con un especialista, ya sea un psicólogo o psiquiatra.
En su mayoría, estos fueron los comentarios que leí en las publicaciones que se hacían sobre Angus. Es realmente triste todos los estigmas que existen en torno al suicidio y a las enfermedades mentales, pero es más triste aún ver a todos los artistas que hemos perdido, Amy Winehouse, Kurt Cobain, Avicii, Robin Williams, entre otros, y la lista continua.
Se llama suicidio
Para poder derribar los estigmas, se tiene que hablar del tema como lo que es, suicidio. Las familias que han sufrido de un suicidio, generalmente convierten el tema en algo tabú, lo convierten en silencio, y nadie, jamás, vuelve a hablar del tema. Esto, no es dignificar el dolor de nuestro ser querido que acaba de partir. Y para hablar de prevención, primero hay que hablar del dolor y referirse al tema como lo que es, suicidio. No es: “Cuando hizo aquello”, “Cuando se disparó”, etc.
Actualmente, el tema de la salud mental ha tomado más relevancia en redes. Basta con entrar a las redes y encontrarse con el montón de videos de personas llorando por depresión o contando su experiencia. Videos de amigos que se han suicidado, o han tenido intentos de suicidio. Personas hablando públicamente de sus trastornos. Famosos que toman descansos de redes por su salud mental; el caso más reciente, el de Tom Holland (Spider-Man) El cual, fue víctima de los medios de comunicación por tomar la decisión, el mismo lo expreso en su más reciente entrevista.
Asimismo, en redes podemos encontrar comunidades de apoyo y páginas que fomentan la prevención del suicidio, como la página Ansiedadepresiva, cuya misión es la implementación de un plan nacional de suicidios en los países. También, cuenta con líneas de emergencia en varios países que se pueden utilizar, en el caso de no existir, como en Nicaragua, se pueden utilizar alternativas como la página Befrienders.org
Desde la apertura de mi página ¡Ahí Vamos! He recibido cantidad de mensajes de personas que se sienten o se han sentido igual con relación a su salud mental. Platicar con las personas, hace percatarme que todos llevamos una batalla interna. He conocido gente nueva que ha llegado a mi vida, que la han pasado o la pasan mal; no es que me crea el único con problemas, sino, que es sorprendente que, cuando caes en conciencia sobre la salud mental, a través de la terapia, aprendes a tener un poco más de consideración por el resto, a compadecerte, a comprender que todos tenemos una historia que contar, una batalla que luchar. Todas esas personas se encuentran allá afuera, queriendo ser escuchadas, simplemente.
Al final, mi labor con el blog se ha vuelto muy personal, al nivel de exponer tanto mi vida para decirle a los demás, que también hay más gente que la pasa igual, que paso por lo mismo, y que sí hay una salida, pues todos… ¡Ahí Vamos! En esta vida, en la lucha de superación constante.
Para terminar, solo me queda desearle a nuestro querido Angus Cloud, el descanso eterno. Definitivamente, Euphoria no será lo mismo sin nuestro dealer favorito.